El municipio de Villanueva del Ariscal ha sido premiado a nivel andaluz en materia educativa. La Consejería de Educación de la Junta de Andalucía ha reconocido al municipio aljarafeño con el premio Educaciudad 2019, por su compromiso con la educación y por su difusión de buenas prácticas educativas.
El objetivo de estos premios es reconocer el trabajo realizado por los municipios durante los últimos cuatro años en ámbitos como la prevención del absentismo escolar, la lucha contra el abandono y el fomento de la continuidad en los estudios pos obligatorios, así como actuaciones para favorecer la formación a lo largo de toda la vida.
Junto a Villanueva son diez las localidades andaluzas premiadas por Educación para recibir este galardón, junto a San Roque (Cádiz), Montemayor (Córdoba), Caniles y Huéscar, ambos municipios de la provincia de Granada, Aljaraque (Huelva), Villacarillo (Jaén), Belnamádena (Málaga), El Real de la Jara y La Puebla de Cazalla, en Sevilla. El consejero de Educación, Javier Imbroda, ha presidido el acto de entrega de los premios celebrado de forma telemática.
Durante su intervención, el consejero ha felicitado a estos municipios que desde hoy son reconocidos como entidades comprometidas activamente por la educación y ha destacado la importancia de la colaboración entre instituciones para avanzar en ámbitos significativos para el éxito educativo de los jóvenes como son «la formación en competencias básicas y digitales así como la cultura emprendedora y la promoción del autoempleo para transformar el abandono escolar que nos acecha en proyectos de vida».
Asimismo, Javier Imbroda ha señalado que el trabajo de educar no se restringe a un aula. «Hace tiempo que la educación traspasó los muros de los colegios e institutos ya que pasa también por las familias, por el entorno y por la comunidad que forman los propios municipios«.
También se valoran los trabajos de coordinación de los servicios y áreas municipales para mejorar la educación, especialmente de colectivos en riesgo de exclusión, y las acciones para impulsar la implicación familiar y ciudadana. Asimismo, se tienen en cuenta las actividades de fomento de la educación de la ciudadanía para la igualdad, solidaridad, convivencia pacífica desde el respeto a los derechos humanos y la mejora de las competencias básicas para formar a una ciudadanía en un entorno culto, solidario y sostenible en sus vertientes social, económica y medioambiental.
Como parte del premio, los municipios galardonados recibirán una gratificación económica que deberán dedicar a la realización de proyectos o actuaciones encaminadas a mejorar las prácticas educativas. La distinción concedida se mantendrá durante cuatro años, tras los cuales los municipios podrán solicitar la continuidad del reconocimiento por otro periodo similar.
El propósito de la Consejería de Educación y Deporte es que a partir de estos proyectos premiados «se abra un mayor proceso de participación social y que la educación se asuma como el valor principal para el cambio y el progreso de la ciudad».