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La sección sindical de CSIF de Villanueva del Ariscal, ante la inminente llegada del Viernes de Dolores, ha alertado del crecimiento de la inseguridad en el municipio, vinculado a la imposibilidad de los agentes de prestar servicio durante las tardes, noches, fines de semana y la Semana Santa.
Por ello, CSIF lamenta «no encontrar voluntad negociadora por parte del alcalde, que no hace más que posponer problemas crónicos como el mantenimiento de un calendario laboral obsoleto y aún en negociaciones iniciales». A ello, añaden «el adeudo de horas extra desde la pasada Feria». Todo ello redunda en una situación «caótica», con dos plazas vacantes por baja de larga duración que siguen sin cubrirse, lo que supone que sólo haya tres agentes de Policía Local actualmente activos, de un total de cinco.
«Empezamos a negociar el calendario laboral, RPT y todo lo demás, allá por enero», explican desde la sección sindical de CSIF de Villanueva del Ariscal. El anterior calendario estaba anticuado y no estaba publicado. «El propio alcalde nos dijo que había que negociar otro y el día 3 de enero nos comprometimos con él para cubrir la Cabalgata de Reyes». «Entonces nos dijeron que se habían pagado ya las horas extra, que estaban pasadas por Pleno para pagarse, cuando en realidad, no es así: las horas que todavía se debían de la Feria del año pasado no están abonadas».
«Nos sentimos derrotados»
Sin embargo, CSIF no ha dejado de presentar propuestas, pero el Ayuntamiento «sólo contesta que se tienen que estudiar, sin más». Se siguen celebrando eventos sin presencia policial, sin turnos de tarde, noche o fines de semana, y mientras tanto, «la inseguridad ciudadana sigue creciendo, con actos vandálicos, carreras de coches, peleas multitudinarias en sitios de copas, así como robos, y todo eso, sin que el Ayuntamiento ponga ningún tipo de remedio».
Según CSIF, las opciones se han acabado: «ya no sabemos qué más vamos a hacer, porque el alcalde nos pone siempre en espera». Ante la llegada del próximo Viernes de Dolores, «a día de hoy, no hay, ni se prevé que haya, cobertura policial alguna; nosotros no podemos hacer ningún servicio si no está pactado o firmado, no podemos arriesgarnos a que nos pase algo fuera de nuestra jornada laboral y no estemos cubiertos».
Los responsables sindicales subrayan que el clima laboral es cada vez peor y afirman sentirse «derrotados» y sin saber cómo afrontar la situación: «parece que la estrategia del alcalde de Villanueva del Ariscal es dejar pasar el tiempo y que las cosas salgan como sea».