- Un juzgado investiga la muerte de un hombre reducido por la Guardia Civil en Mairena
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El Juzgado de Instrucción número dos de Sevilla ha archivado la causa por los hechos ocurridos el pasado 12 de septiembre de 2022 en la localidad de Mairena del Aljarafe, cuando un varón de 37 años murió después de ser reducido por la Guardia Civil, después de que sus padres solicitasen protección al haber sufrido violencia doméstica por parte del fallecido.
Tanto la autopsia como el auto de sobreseimiento consideran que la actuación de los agentes no fue la causa de la muerte, y el juzgado considera que sus actos estuvieron justificados, contradiciendo la versión de los padres del varón. En cambio, la autopsia apunta a una combinación entre el estado de sobreexcitación y el consumo de sustancias como cocaína y alcohol. Sin embargo, tal y como ha adelantado ABC Sevilla, la familia pretende llevar el caso a la Audiencia Provincial al estar insatisfechos con la sentencia.
Enfrentamiento con los agentes
Los agentes de la Guardia Civil acudieron al domicilio en Mairena después de que los padres del fallecido contactasen con las autoridades, ya que su hijo les había agredido en un momento en el que se encontraba «muy excitado y violento», y apuntaron a la posibilidad de que se encontrase bajo los efectos de alguna droga. Cuando los guardias civiles llegaron al domicilio, se produjo un enfrentamiento entre ellos y el fallecido.
Según el atestado policial, el hombre amenazó a los agentes con un martillo. En el documento se relata que los agentes intentaron «mediar y calmar» al individuo, pero el varón se mantuvo muy violento y lanzó diversas herramientas a los guardias civiles. Fue entonces cuando se produjo un intento de reducción y un forcejeo.
Según la denuncia de los padres, quienes fueron testigos de lo ocurrido, percibieron que la actuación de inmovilización de los agentes se estaba excediendo, y decidieron grabar lo ocurrido, unos vídeos que colgaron posteriormente a las redes sociales.
Fallecimiento
Tras conseguir colocar unas esposas, el detenido dejó de respirar y parecía estar «inconsciente». El atestado policial relata que se realizaron entonces maniobras de reanimación.
El fallecido fue trasladado al Hospital San Juan de Dios de Bormujos, donde murió una semana después, el día 19 de septiembre. Posteriormente, la autopsia negaría que la muerte del hombre fuera causada por la actuación de los agentes. En cambio, el informe apuntaba a una parada cardiorrespiratoria resultante de la combinación entre el alcohol, consumo de drogas como la cocaína y el cannabis, y un elevado estado de sobreexcitación.