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La Guardia Civil, a través del Equipo de Policía Judicial de Mairena del Aljarafe, desmantela un grupo criminal dedicado a robos con violencia en el interior de viviendas en la provincia. La operación concluye con la detención e investigación de un total de nueve personas, por delitos de robo con violencia e intimidación con uso de arma de fuego y resultado de lesiones cometido en interior de vivienda y otro de pertenencia a grupo criminal.
Según el Instituto Armado, la investigación se inició tras un violento asalto ocurrido en septiembre de 2023 en Gines, cuando un grupo de personas irrumpió en una vivienda con extrema violencia, atacando brutalmente a la propietaria y sustrayendo una gran cantidad de joyas y dinero en efectivo. Durante el asalto, los delincuentes intimidaron a la víctima con un arma de fuego, propinándole golpes que le causaron «heridas de consideración» y amenazándola con «amputarle un dedo en caso de no colaborar». Según el relato de los agentes, lograron fracturar dos cajas fuertes y sustraer el botín.
La trabajadora del hogar era colaboradora
Desde el inicio de la investigación, los agentes detectaron que los autores contaban con información sobre la vivienda del Aljarafe y sus moradores, lo que permitió identificar a una trabajadora del hogar como posible colaboradora del grupo, que cometía robos en varias viviendas. La investigación reveló que la empleada podría haber facilitado el acceso a los autores del delito. Asimismo, se estableció la participación de otros miembros de la organización con distintos roles dentro del grupo, como vigilancia del entorno y conducción de los vehículos utilizados en la huida.
Las pesquisas llevaron a la identificación de los vehículos empleados en el asalto y a la localización de los sospechosos, la mayoría de los cuales residían en Sevilla. La Guardia Civil, además, descubrió que el líder del grupo regentaba un establecimiento que servía de punto de reunión para los miembros de la banda, lo que les permitía organizar los asaltos con discreción. El grupo criminal tenía antecedentes por delitos similares en distintas provincias de Andalucía. De hecho, el cabecilla de la organización había sido detenido recientemente por un delito de homicidio en grado de tentativa.
A pesar de la hermeticidad del entorno en el que se movían los sospechosos y a los constantes desplazamientos de algunos de ellos a otras provincias andaluzas y a Marruecos, los agentes pudieron identificar a todos los implicados. Así, lograron desarticular el grupo criminal y recuperar parte de los objetos sustraídos.