Situado en pleno corazón del Aljarafe sevillano, a tan solo siete kilómetros de la capital andaluza, Bormujos destaca como un municipio que combina tradición y modernidad. Su historia, profundamente vinculada al desarrollo agrícola y cultural de la región, se remonta a tiempos romanos y refleja la riqueza de su legado histórico.
Orígenes históricos: De villas romanas a alquerías musulmanas
Los primeros asentamientos estables en Bormujos se remontan a la época romana. En este período, la región del Aljarafe era conocida por su fertilidad agrícola, y las villas romanas de la zona se especializaron en la producción de aceite y otros productos alimenticios, esenciales para la economía de la Hispania romana.
Con la llegada de los musulmanes en el siglo VIII, estas villas evolucionaron hacia alquerías, pequeñas comunidades agrícolas que consolidaron la tradición del cultivo del olivo y la vid. Durante este período, el sistema de regadío y las técnicas de cultivo avanzadas impulsaron la producción agrícola, sentando las bases del desarrollo económico local.
Reconquista y transición a manos cristianas
En 1248, durante la Reconquista liderada por Fernando III «El Santo», Bormujos fue integrado al reino de Castilla. Poco después, en el Repartimiento de Alfonso X en 1253, aparece mencionado como «Mormojos» o «Mormujos», nombre que evolucionaría al actual «Bormujos».
El origen del nombre ha sido objeto de debate. Algunos historiadores sugieren que deriva del latín «Mormolium», que significa «manantial», mientras que otros creen que proviene de una alquería árabe llamada «Boromuji». Esta conexión con el agua subraya la importancia de los recursos naturales en la formación de la comunidad.
Edad Moderna: Un municipio bajo señorío
Durante el siglo XVII, Bormujos pasó a formar parte de los dominios de los condes de Olivares, de la influyente casa Guzmán. En esta etapa, la localidad continuó su desarrollo como una comunidad agrícola centrada en el cultivo del olivo y la vid. Sin embargo, no fue hasta la abolición de los señoríos a principios del siglo XIX cuando Bormujos se constituyó como un municipio independiente.
Siglo XX: Crecimiento y transformación
El siglo XX marcó un punto de inflexión en la historia de Bormujos. La proximidad a Sevilla impulsó su desarrollo económico y social, transformando la localidad en un área residencial y de servicios. La inauguración en 1999 del campus universitario de la Universidad CEU San Pablo, el primero de carácter privado en Andalucía, consolidó a Bormujos como un importante núcleo educativo en la región.
Además, la apertura del Hospital San Juan de Dios y otros servicios de salud reforzaron su papel como un municipio moderno y dinámico.
Un municipio entre tradición y modernidad
Hoy en día, Bormujos combina su herencia histórica con un crecimiento urbano constante. Sus tradiciones, como las fiestas patronales en honor a Nuestra Señora de la Encarnación y su rica Semana Santa, conviven con una oferta cultural y educativa en continuo crecimiento.
El municipio mantiene viva su identidad como parte del Aljarafe, al mismo tiempo que se adapta a las demandas de un entorno metropolitano. Bormujos es, en esencia, un ejemplo de cómo una comunidad puede evolucionar sin perder de vista sus raíces.